sábado, 9 de marzo de 2013

Maldita.

Descubrí en la luna de Enero tu calor de verano.
Me perdí entre los vientos que traían el eco de tu voz.
Como hipnotizado por tus huesos te coroné en vano.
Ahora soy el desdichado que se muere por amor.


A la luz de la hoguera intuyo tu rostro
y me olvido de que nunca estuviste, que solo hiciste
mella en mi mente, como un monstruo
y desgarraste la realidad que me prometiste.

Dentro de mí solo quedan goteras
te devuelvo las letras de cambio que me diste
y no vuelvas por estas  fronteras,
acuérdate que tu sitio se largó contigo cuando te fuiste

Eras la reina de los rompecabezas en ausencia
me desvelaba por culpa de tus sueños
y soñaba, por culpa de tu presencia
que era al fin  de mi vida el dueño.

¡Maldito amor que te trajo hasta mi cama!
¡Malditos besos que me despertaban cada mañana!
¡Maldito cuerpo que desataba mi alma!
¡Maldito el tiempo que me dejó sin nada!

No vuelvas  ni en enero ni a la hoguera,
perdiste la oportunidad que te di,
machacaste mi amor con crudeza
y tuve que enterraros ambos, tanto a él como a ti.



2 comentarios:

  1. Una maravilla, amigo. Sigue escribiendo así, porque siempre habrá gente que te lea y disfrute haciéndolo.

    ResponderEliminar
  2. Muchísimas gracias. Sois los que leéis lo que escribo los que hacéis que este blog tenga sentido :)

    ResponderEliminar